Febrero 6 del 2024

Lapid promete traer de regreso a los rehenes de Gaza en las conversaciones del gobierno con Netanyahu


Yair Lapid, izquierda, y Benjamin Netanyahu, derecha.

«Sólo me importa una cosa: que vuelvan los rehenes», dijo Lapid.

POR: ELIAV BREUER

El primer ministro Benjamin Netanyahu y el líder de la oposición y presidente de Yesh Atid, el parlamentario Yair Lapid, discutieron la oferta de este último para proporcionar una «red de seguridad», durante una actualización periódica de seguridad el lunes, dijo Lapid en una declaración de vídeo después de la reunión.

«Le dije al primer ministro – no me importan los ministerios, he servido como ministro de Asuntos Exteriores, he servido como ministro de Finanzas, he servido como primer ministro. Sólo me importa una cosa: traer de regreso a los rehenes, y si necesita una red de seguridad de cualquier tipo -que entremos en el gobierno, desde fuera del gobierno, de cualquier forma- que lo diga», dijo Lapid a KAN News tras la reunión.

En las últimas semanas, Lapid ha ofrecido unirse al gobierno para liberar a los 136 rehenes israelíes cautivos de Hamás, partiendo de la base de que los ministros de extrema derecha, el ministro de Seguridad Nacional, parlamentario Itamar Ben-Gvir, y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, podrían abandonar el gobierno por un acuerdo sobre los rehenes si éste incluye un alto el fuego significativo y la liberación de muchos terroristas palestinos convictos. Esto dejaría a la coalición gobernante sin mayoría en la Knesset.

Anteriormente, el lunes, Lapid dijo en respuesta a una pregunta de The Jerusalem Post en una conferencia de prensa, que Ben-Gvir, que lidera el partido de extrema derecha Otzma Yehudit (Poder Judío), es la «cara de Israel y del gobierno que ve la gente en el mundo, y esto no sólo es indignante, es peligroso».


El jefe de la oposición, Yair Lapid, responde a una pregunta de Eliav Breuer, del Jerusalem Post. 5 de febrero de 2024.

Las críticas de Lapid se produjeron en respuesta a una entrevista con Ben-Gvir publicada el domingo en The Wall Street Journal, en la que el ministro de Seguridad Nacional dijo: «En lugar de darnos todo su apoyo, Biden está ocupado con la ayuda humanitaria y el combustible [a Gaza], que va a parar a Hamás. Si Trump [estuviera] en el poder, la conducta de Estados Unidos sería completamente diferente».

Reacción de los políticos a la entrevista de Ben-Gvir

Cuando se le preguntó si las declaraciones de Ben-Gvir eran realmente perjudiciales, ya que no es miembro del gabinete de guerra y no tiene mucho contacto con funcionarios estadounidenses, Lapid dijo: «Desafortunadamente, las cosas escandalosas que dijo al WSJ influyeron bastante … Creo que la gente sí lo toma en serio porque conocen el tamaño y la magnitud de su efecto en el gobierno … y es una fuerza política.»

El ministro de Defensa, Yoav Gallant, en un discurso pronunciado más tarde por la noche, dijo que «Ben-Gvir no forma parte del órgano autorizado que toma las decisiones».

Lapid advirtió que el mes de Ramadán está a la vuelta de la esquina y que la conducta de Ben-Gvir conducirá a otro desastre, ya que el Ramadán se considera un período de mayores tensiones en materia de seguridad.

«Considero que es mi deber advertir al Gobierno. El país no está preparado. No hay preparación. No hay plan. No ha habido debates suficientes a nivel operativo y diplomático. Vamos camino de un desastre, de otro desastre», advirtió Lapid.

Lapid afirmó que, aunque Ben-Gvir «quería» que la tensión «estallara en llamas», eso no era lo que Israel necesitaba. Pidió al primer ministro que «destituya a las autoridades de Ben-Gvir y forme inmediatamente un equipo superior para preparar al país».

Ben-Gvir abordó las críticas en su conferencia de prensa semanal del lunes. Aunque reconoció la «complicada realidad» de la relación de Israel con la administración estadounidense, Ben-Gvir reiteró que «la administración Biden debe dejar de presionarnos para que suministremos combustible y equipos humanitarios que acaban yendo a Hamás».

Ben-Gvir añadió que aprendió dos cosas de las respuestas: Primero, que mucha gente en Israel estaba de acuerdo con él en que las acciones de Biden estaban contribuyendo a la capacidad de Hamás para luchar contra Israel, y segundo, que tanto a los analistas políticos como a los miembros del Likud no les gustaban sus críticas. Ben-Gvir afirmó que miles de personas le habían escrito diciendo que estaban de acuerdo con su afirmación, y también que una «fuente anónima» del Likud se puso en contacto con miembros del partido y les dijo que lo atacaran públicamente.

«Quiero decir a esa fuente, y quiero decir a esos miembros de la Knesset, y quiero decir a esos analistas: Hago las cosas a mi manera, sin vacilar, sin echarme atrás, [sigo] planteando cosas que perjudican a los israelíes: Hay un problema con la conducta del pequeño gabinete [de guerra] frente a la administración estadounidense», dijo Ben-Gvir.

En un extraño suceso ocurrido el lunes por la tarde, Yoav Gallant y el ministro sin cartera Benny Gantz, ambos en el gabinete de guerra, anunciaron con pocos minutos de diferencia que iban a dar conferencias de prensa por separado a la misma hora el lunes por la noche. Los dos desconocían los planes del otro, y Gantz canceló su rueda de prensa poco después. El presidente de Yisrael Beytenu, el parlamentario Avigdor Liberman, criticó al gobierno por el suceso y argumentó que demostraba que el gobierno no estaba funcionando correctamente.

En otras noticias del lunes, el ministro de Finanzas y presidente del Partido Sionista Religioso, Bezalel Smotrich, incluyó el presupuesto nacional para el año 2024 en el orden del día de la Knesset, más de dos semanas después del plazo del 20 de enero exigido por la Ley Básica cuasi constitucional de Israel: Economía del Estado. La Knesset, por ley, debe debatir el presupuesto durante un mínimo de 30 días, y según la ley, el 19 de febrero se producirá un recorte presupuestario generalizado en todos los ministerios del gobierno, que estará en vigor hasta que se apruebe la nueva ley presupuestaria.

Las consecuencias del retraso son que el gobierno no podrá realizar nuevas transacciones a partir del 19 de febrero y hasta que se apruebe el presupuesto.

En su rueda de prensa semanal del lunes, Smotrich dijo que su partido «respetaba las leyes básicas», pero que su metódico trabajo para preparar el presupuesto no le permitía llevarlo a tiempo a la Knesset. Smotrich restó importancia a las consecuencias del recorte presupuestario del 19 de febrero, afirmando que será un «recorte falso», ya que se espera que el proyecto de ley de presupuestos se apruebe poco después. Smotrich también culpó a la Fiscal General, Gali Baharav-Miara, afirmando que ella le aconsejó violar la Ley Fundamental en lugar de alargar el plazo, ya que cambiarla por cuestiones concretas subvierte su rango constitucional.

Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil
Fuente: The Jerusalem Post



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