Los ministros fustigan a la fiscal general en la reunión del gabinete, exigen la represión de las protestas e instan a su destitución

Baharav-Miara fustigada; los ministros dicen que ella es blanda con las protestas contra la reforma, respalda a los manifestantes; la fiscal: espero que el gobierno no esté tratando de revocar a la policía y establecer cuotas de arresto; Gantz: un espectáculo de terror

Por Jeremy Sharon


La fiscal general Gali Baharav-Miara llega para asistir a la reunión semanal del gabinete en la oficina del primer ministro en Jerusalén el domingo 9 de julio de 2023.
(Gil Cohen-Magen/Pool Photo vía AP)

Una sucesión de ministros en el gobierno de línea dura del primer ministro Benjamín Netanyahu ridiculizó y denunció a la fiscal general Gali Baharav-Miara durante una estridente reunión de gabinete de una hora de duración el domingo, en la que fue atacada repetidamente por el manejo de las infracciones de la ley por parte de las autoridades durante las manifestaciones contra el gobierno. Se hicieron varios pedidos para su despido.

Netanyahu comenzó lo que se convirtió en un debate airado y tempestuoso al decirle a Baharav-Miara que “la aplicación selectiva es una herida fatal para la democracia”, y sus ministros pronto se juntaron para fustigar a la fiscal general por el tema.

Baharav-Miara y otros altos funcionarios del Ministerio de Justicia fueron convocados a la reunión de gabinete del domingo para discutir cómo las agencias de aplicación de la ley han manejado la ola masiva de protestas contra los esfuerzos del gobierno para reformar el poder judicial, que incluyeron el bloqueo de carreteras y otras formas de desobediencia civil.

Los ministros se han enfadado por lo que ven como un trato demasiado suave hacia los manifestantes que los acosan y los interrumpen donde quiera que vayan, organizan protestas en sus hogares y bloquean carreteras clave durante horas.

La ministra de Transporte, Miri Regev, dijo que Baharav-Miara debería ser despedida ante lo que la ministra del Likud dijo que era la falta de voluntad de la fiscal general para evitar perturbaciones de la paz; el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, dijo que no acusar a más manifestantes era “vergonzoso”; la ministra de Diplomacia Pública, Galit Distel Atbaryan, le dijo que “la aplicación selectiva es mala”; y el ministro de Justicia, Yariv Levin, la acusó de ponerse del lado de los manifestantes y sugirió sarcásticamente que simplemente debería anunciar que bloquear la autopista Ayalon de Tel Aviv es legal.

Kan News informó que, al hablar con los ministros afuera de la reunión del gabinete, Netanyahu no descartó la posibilidad de despedir a Baharav-Miara. Altos ministros del gabinete, de forma anónima, le dijeron a Kan que la reunión estaba destinada a demostrar la grave falta de confianza entre el gobierno y la fiscal general, lo que podría justificar su destitución. El partido Likud negó el informe y dijo que Netanyahu había sido el que en la reunión del gabinete descartó despedir a la fiscal general.

Baharav-Miara respondió a los ministros acusándolos implícitamente de intento de interferencia política en la forma en que los organismos encargados de hacer cumplir la ley manejas las protestas contra el gobierno.

“Espero que el gobierno no me esté pidiendo que diga que quiere aplicar más agresividad para reprimir la protesta en su contra, en contra del juicio profesional de los comandantes [de policía] sobre el terreno y de la fiscalía estatal”, afirmó en respuesta a la ola de denuncias.


El primer ministro Benjamín Netanyahu encabeza una reunión de gabinete en la oficina del primer ministro en Jerusalén, el 9 de julio de 2023.
(Marc Israel Sellem/POOL)

“Espero que el gobierno no espere que el sistema de aplicación de la ley cumpla con cuotas de arrestos o acusaciones contra los manifestantes”, agregó.

El líder opositor Yair Lapid denunció el ataque del gabinete contra la fiscal general como “una novatada violenta” y un ejemplo del intento del gobierno de “eliminar por la fuerza nuestra democracia”.

El jefe del partido de la oposición, Benny Gantz, calificó la reunión como “la culminación de una campaña de infundir miedo contra los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley”.

“El espectáculo de terror de Netanyahu y Ben Gvir plantea la preocupación de que el gobierno no busca la aplicación igualitaria, sino más bien la aplicación de la intimidación” contra los manifestantes contra la reforma, dijo Gantz.

Al final de la reunión, se le pidió a Baharav-Miara que presentara un documento al gabinete dentro de siete días que detallara la política de aplicación de la ley respecto del bloqueo de carreteras, las protestas en las casas de los funcionarios electos y los llamados a negarse a servir en el ejército y otras formas de desobediencia civil.


El jefe de Unidad Nacional, Benny Gantz, dirige una reunión de facciones de su partido en Ramat Gan, el 9 de julio de 2023.
(Avshalom Sassoni/Flash90)

También se le dijo que presentara una política clara sobre qué hará en el aeropuerto Ben Gurión para el martes, cuando se planean nuevamente protestas masivas en el aeropuerto. Las protestas han sido convocadas porque se espera que el parlamento apruebe el lunes la primera lectura de un proyecto de ley que prohíbe el uso de la doctrina de la «razonabilidad» para revisar las decisiones tomadas por el gabinete, los ministros del gobierno y otros funcionarios electos.

El gabinete exigió además que la fiscal general detalle las políticas relacionadas con el bloqueo de carreteras, incluyendo “si, y con qué frecuencia, se permite bloquear las principales rutas de tráfico sin que se tomen medidas coercitivas contra los organizadores del bloqueo y los que bloquean las carreteras, sin que se realicen detenciones ni se presenten acusaciones”.

Convocados al gabinete

Baharav-Miara y otros altos funcionarios del Ministerio de Justicia fueron convocados a la reunión de gabinete del domingo para discutir cómo las fuerzas del orden han enfrentado la ola masiva de protestas contra el gobierno desde que asumió el cargo, que incluyeron el bloqueo de carreteras y otras formas de desobediencia civil.

Según las cifras presentadas durante la reunión, la policía arrestó a 572 manifestantes desde que comenzaron las manifestaciones en enero por perturbar el orden público, desobedecer las instrucciones policiales o agredir a los policías. De esos casos, se presentaron seis acusaciones, todas por agredir a policías.

Según un informe de Ynet, la fiscal general dijo en un momento que “no existe tal cosa como una protesta efectiva sin disturbios públicos”, y citó un fallo judicial que permitía protestas cerca de la casa del ex fiscal general Avichai Mandelblit.

Se dijo que esto provocó una respuesta furiosa de Netanyahu. “¿Asediar una peluquería a seis centímetros [de mi esposa]? Ningún tribunal [permitiría] eso”, enfureció el primer ministro, en referencia a un incidente ocurrido el 1 de marzo cuando una peluquería de Tel Aviv visitada por Sara Netanyahu fue rodeada por cientos de manifestantes antigubernamentales.

“Entonces, si quieres una buena protesta, ve y viola la ley. Es increíble. Es imposible. Eso pone en peligro el estado de derecho”, dijo Netanyahu.

“Si la fiscal general apoya y permite perturbaciones del orden público, en contra de la opinión de la Corte Suprema y de los fiscales generales anteriores, entonces, ¿cuál es el trabajo de los funcionarios electos?” exigió Regev. “Si la fiscal general… no está dispuesta a ayudar al funcionamiento del gobierno, tal vez debería ser despedida”.

A su llamado a despedir a Baharav-Miara se unió el ministro de Cooperación Regional, David Amsalem, quien también es segundo ministro en el Ministerio de Justicia. Amsalem dijo que tanto Baharav-Miara como el fiscal estatal Amit Aisman deberían ser despedidos.

Cuando, según varios medios de comunicación hebreos, Netanyahu reprendió a Amsalem por sus comentarios, Amsalem supuestamente respondió que el primer ministro tenía “un conflicto de intereses” con respecto a la fiscal general – una aparente burla sobre el juicio penal en curso de Netanyahu.

Ben Gvir, quien tiene autoridad sobre la policía como ministro de seguridad nacional, exigió saber cuántos manifestantes habían sido acusados y “¿cuántos fueron investigados bajo sospecha de conspiración criminal para organizar disturbios?”

Cuando un funcionario del Ministerio de Justicia le dijo que las respuestas eran seis y cero respectivamente, Ben Gvir explotó y declaró: “Es simplemente una vergüenza. No hay cumplimiento”.


El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, habla durante una conferencia de prensa en el parlamento el 5 de julio de 2023.
(Yonatan Sindel/Flash90)

Negev y el ministro de Desarrollo de Galilea, Yitzhak Wasserlauf, miembro del partido de extrema derecha Otzma Yehudit de Ben Gvir, amenazaron con emprender acciones legales contra Baharav-Miara.

“Todos los ciudadanos de Israel ven la aplicación selectiva, por lo que estoy levantando una clara bandera roja aquí. No sería agradable que tuviéramos que hacer una petición al Tribunal Superior de Justicia contra la fiscal general que no está haciendo su trabajo como se esperaba”, dijo Wasserlauf.

En una larga condena de la fiscal general, transmitida por el Canal 12 en una grabación filtrada de la reunión, Levin dijo que había impedido que el gobierno presentara sus borradores de la legislación de reforma “simplemente porque tenía una opinión diferente [a la del gobierno] o porque no le gustaba [lo que se proponía]. Recuerdo que ella pronunció un discurso contundente en contra de esta política de gobierno y en contra de la reforma judicial… Yo le pregunto, ¿no es eso sumamente problemático?”.

(En un discurso en enero, Baharav-Miara dijo que las propuestas de Levin crearían un «sistema desequilibrado de controles y equilibrios» y que «el principio del gobierno de la mayoría arrinconaría otros valores democráticos». El mes siguiente, escribió que los planes le darían al gobierno un poder virtualmente ilimitado, sin proporcionar ninguna protección institucional para los derechos individuales o para el carácter democrático de Israel).

Baharav-Miara respondió a Levin el domingo: “Las opiniones legales [presentadas por su oficina sobre la legislación de revisión] son opiniones profesionales, presentadas después de un extenso trabajo profesional, que incluye una evaluación legal comparativa… presentadas al ministro a petición suya y dentro del plazo.”

El ministro de Justicia la interrumpió diciendo que no había solicitado una opinión legal completa, sino un memorando más limitado. Luego afirmó que ella estaba “del lado” de los manifestantes contra la reforma, y que los manifestantes exigen que ella y su oficina sean fortalecidas.

En respuesta a ese último punto, la fiscal general dijo: “Esa no es razón para cambiar mi visión profesional”.

Levin volvió a interrumpir y afirmó que su postura la colocaba en una posición de conflicto de intereses y sugirió que hubiera sido más prudente que ella “no tomara partido” en la disputa sobre la legislación.

El comisionado de policía Kobi Shabtai, quien también fue convocado a la reunión, insistió en que es política de la policía evitar el bloqueo de carreteras e intersecciones y destacó que la fuerza es apolítica.

“La política es que está prohibido bloquear las carreteras. Podríamos tomar bastones y caballos y despejar [la protesta] en un minuto, pero ¿cuántos heridos habría?” cuestionó Shabtai, según un informe de Kan News.


El jefe de policía Kobi Shabtai (I) camino a asistir a la reunión semanal del gabinete en la Oficina del Primer Ministro en Jerusalén el 9 de julio de 2023.
(GIL COHEN-MAGEN / POOL / AFP)

Y señaló que el número de policías lesionados durante las protestas desde enero “es cero”, y agregó que ningún oficial había requerido tratamiento hospitalario por lesiones sufridas durante las protestas.

Lapid y otros miembros de la oposición condenaron el trato a Baharav-Miara por parte del gabinete y acusaron al gobierno de socavar las normas democráticas en su comportamiento hacia ella.

“El gobierno llevó a cabo un ataque contra la fiscal general hoy. El feo ataque de los ministros contra Gali Bahara-Miara, una [persona] decente y una ‘cuidadora’ que solo está haciendo su trabajo, es una demostración de lo que están tratando de hacerle a la sociedad israelí: intimidación en lugar del estado de derecho, la violencia gubernamental contra ciudadanos y funcionarios, la eliminación contundente de nuestra democracia”, dijo Lapid.

El líder laborista Merav Michaeli comparó el ataque a Baharav-Miara con el comportamiento de regímenes autocráticos como Rusia.

“El ataque planeado por el gobierno contra la fiscal general debería sacudirnos hasta la médula. El gobierno de Israel convocó a la fiscal general a una audiencia en la que se le pidió que respondiera preguntas sobre cuántos manifestantes fueron arrestados y llevados para ser interrogados. Esto no está sucediendo en la Rusia de Putin, sucede aquí en el Israel de Netanyahu”, dijo Michaeli.

 

Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil
Fuente: The Times of Israel



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