28 Dic Yair Netanyahu insinúa que aquellos que enjuiciaron a su padre deberían enfrentar la pena de muerte
Yair Netanyahu llega para una audiencia de la corte en Tel Aviv, 29 de noviembre del 2022.
El hijo del primer ministro entrante afirma que las acusaciones contra el líder del Likud son un ´golpe de estado´, luego dice que la referencia al castigo por traición tiene como objetivo ilustrar la ´gravedad´ del asunto.
El hijo del primer ministro entrante, Benjamin Netanyahu, dijo el domingo que los fiscales y policías de alto rango cometieron ¨traición¨, un delito que se castiga con la pena de muerte, por presuntamente incriminar a su padre, que actualmente está siendo juzgado por corrupción.
¨Al final, había un golpe de estado deliberado aquí¨, le dijo Yair Netanyahu a Radio Galey Yisrael.
¨Es llamado un golpe, es llamado traición, y todos pueden mirar las leyes del Estado de Israel y ver cuál es el castigo por traición -y no es prisión¨, le dijo a la estación de radio de derecha.
Los comentarios del Netanyahu más joven, que tiene una historia de hacer declaraciones incendiarias, se hicieron eco de los ataques casi constantes contra las fuerzas de la ley y el sistema judicial ya que los partidarios del líder del Likud han buscado deslegitimar los casos presentados en su contra.
Benjamin Netanyahu está siendo juzgado en tres casos de corrupción, enfrentando acusaciones de fraude y abuso de confianza, así como una acusación de soborno en el Caso 4000.
Bajo la ley israelí, la traición puede ser castigable con la muerte en algunos casos, pero Israel ha impuesto la pena de muerte por ese delito sólo una vez, cuando impuso una corte militar contra el oficial de las FDI, Meir Tobianski, en la Guerra de la Independencia en 1948. La única otra ocasión en que se ha ejecutado la pena de muerte desde entonces fue contra el arquitecto del Holocausto, Adolf Eichmann, quien fue colgado en 1962 por genocidio y crímenes contra la humanidad.
Los acuerdos de coalición para el gobierno entrante han incluido un acuerdo para promulgar la pena de muerte para los terroristas.
Yair Netanyahu, quien se ha posicionado a sí mismo como un provocador de derecha, ha publicado regularmente mensajes inflamatorios en las redes sociales y tuits en contra de aquellos que cree que le han hecho daño a él y a su familia, algunas veces infringiendo los términos de uso y las leyes de difamación.
El parlamentario Benjamin Netanyahu durante una audiencia de la corte en su juicio, en la Corte de Distrito de Jerusalem, 31 de mayo del 2022.
En un tuit de seguimiento más tarde el domingo, Yair Netanyahu dijo que su intención había sido destacar ¨la gravedad de los crímenes cometidos por aquellos que inventaron los casos, de acuerdo con la ley israelí, y nada más allá de eso, ciertamente no hacer llamados para dañar a nadie¨.
El Netanyahu mayor niega haber actuado mal en los casos contra él y afirma, sin evidencia, que las acusaciones fueron fabricadas en una cacería de brujas liderada por la policía y la fiscalía del estado. Sus partidarios y aliados políticos se han hecho eco de esas afirmaciones, los cuales han respaldado cambios de gran alcance en el sistema judicial que, según dicen los críticos, podrían protegerlo.
La semana pasada, el presidente de Sionismo Religioso, Bezalel Smotrich, tuiteó que ¨las injusticias reveladas en los últimos días del juicio de Netanyahu prueban una vez más la necesidad vital de corregir el sistema legal en Israel¨.
Smotrich, un socio clave en el gobierno entrante de Netanyahu, agregó que trabajaría para adoptar los puntos claves de una reforma que propuso durante la campaña electoral, que incluyó eliminar la acusación de fraude y abuso de confianza del código penal.
Smotrich hizo los comentarios después de que los testigos que testificaron en el juicio penal de Netanyahu, acusaron a los investigadores policiales de acoso y dijeron que fueron engañados.
Si bien Netanyahu se ha mantenido cuidadosamente en silencio sobre la reforma judicial en años recientes en medio de la investigación sobre él y el subsiguiente juicio, su confidente cercano y nuevo presidente de la Knesset, el parlamentario Yariv Levin, es un firme partidario de la reforma judicial y probablemente dirigirá el ministerio de justicia.
El gobierno entrante ya ha declarado su intención de aumentar el control policial sobre el poder judicial. Tres propuestas claves siendo discutidas son una medida para legislar una cláusula de anulación, por las cuales, la Knesset puede restablecer cualquier ley invalidada por la Corte Suprema; poner los nombramientos judiciales bajo control político, a diferencia del actual panel híbrido político-profesional-judicial de nombramientos; y dividió el papel del fiscal general, que actualmente es tanto el jefe de la fiscalía estatal como el asesor legal del gobierno.
El Likud también ha dicho que planea convertir a los asesores legales de los ministerios en puestos de confianza, lo que significa que los asesores serían contratados y despedidos por voluntad política. Actualmente, los asesores legales del gobierno están subordinados a la fiscalía estatal, a fin de mantener la independencia de sus abogados.
La fiscal estatal, Gali Baharav-Miara ha advertido que las propuestas de la coalición entrante para la reforma judicial, así como el bombardeo legislativo en curso que incluye cambios a las Leyes Básicas casi constitucionales de Israel, podrían convertir a Israel en ¨una democracia de nombre solamente¨.
Fuente: The Times of Israel
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil
