Agosto 18 del 2022

En el 2021, los inmigrantes estadounidenses nuevamente se mudaron a los asentamientos mucho más que otros recién llegados

POR: Judah Ari Gross

Foto Ilustrativa: Un nuevo complejo de viviendas, donde el ex gobernador de Arkansas, Mike Huckabee, colocó ladrillos en un complejo de viviendas en el asentamiento de la Franja Occidental de Efrat, 1 de agosto del 2018.

Cifras frescas publicadas por la Oficina Central de Estadísticas (CBS por sus siglas en inglés) muestran que casi una de cada diez personas que llegan a Israel desde Estados Unidos se dirige a un asentamiento en la Franja Occidental.

Los inmigrantes estadounidenses se mudaron a los asentamientos de la Franja Occidental en una tasa tres veces más alta que el promedio de todas las llegadas en el 2021, según nuevas cifras publicadas por la Oficina Central de Estadísticas esta semana.

Casi una de cada diez personas que se mudan a Israel desde Estados Unidos -333 de 3,480 -hizo su primer hogar en la Franja Occidental. Esto en comparación al 2.6 por ciento que hizo lo mismo desde Francia, 1.7% de Rusia y 1.6% de Ucrania.

En promedio, 3.2% de todos los inmigrantes, incluidos los estadounidenses, se mudan a los asentamientos a su llegada al país.

Los 333 inmigrantes estadounidenses que se mudaron a los asentamientos representan un importante aumento en números reales con respecto a años anteriores; en el 2020, menos de 200 inmigrantes estadounidenses se mudaron a los asentamientos. Pero eso se debe a un aumento en general en los inmigrantes a Israel desde Estados Unidos en el 2021, no a un cambio de tendencia.

El año pasado fue un año excepcional para la inmigración a Israel desde Estados Unidos, con unas 4,000 personas que se mudaron, el número más alto desde 1973, según el Ministerio de Inmigración y Absorción. Esto fue, en parte, debido a un retraso creado el año anterior por la pandemia de coronavirus. El ministerio contó más llegadas que el CBS porque ésta usa un criterio ligeramente diferente para determinar quién califica como nuevo inmigrante.

Sin embargo, la proporción de nuevos inmigrantes estadounidenses que se mudan a los asentamientos ha permanecido relativamente consistente durante la última década más o menos, con casi el 10-15% optando, en última instancia, mudarse a la Franja Occidental, según Sarah Hirschorn, profesora asociada de estudios de Israel en la Northwestern University, quien ha investigado extensamente el papel de los judíos estadounidense en la empresa de asentamientos.

¨El porcentaje que se muda a los asentamientos -no sabemos el número exacto -ha sido muy consistente durante la última década¨, dijo Hirschorn.

El número preciso no está claro ya que la Oficina Central de Estadísticas puede rastrear el primer lugar donde los inmigrantes eligen establecerse, no dónde finalmente terminan. Así que, si una familia llega inmediatamente a Jerusalem, pero después de unos meses se muda al asentamiento Neve Daniel, esto no aparecería en las cifras de la CBS.

En su libro, ¨La Ciudad en lo Alto de la Colina: Los judíos estadounidenses y el Movimiento de Asentamiento Israelí¨, Hirschorn estima que los ciudadanos estadounidenses representan el 15% de la población general de los asentamientos, una cifra significativamente desproporcionada, basada en una variedad de fuentes de datos. Menos de 200,000 ciudadanos de Estados Unidos se estima que viven en Israel, o casi el 2.2% de la población total israelí.

Hirschorn atribuye esta presencia inflada de judíos estadounidenses en la Franja Occidental a una combinación de ideología y el atractivo natural de los asentamientos para inmigrantes religiosos angloparlantes.

La inmigración a Israel, o aliyah, de Estados Unidos es abrumadoramente un asunto de preferencia personal. A diferencia de los judíos rusos que escapan de un régimen cada vez más totalitario o los judíos franceses que huyen del antisemitismo, los judíos estadounidenses están corriendo a Israel, no alejándose de Estados Unidos.

¨La aliyah estadounidense -a pesar del actual aumento del antisemitismo -todavía es una aliyah de elección. Los franceses y rusos están tratando de salir porque perciben una amenaza¨, dijo Hirschorn.

La mayoría de los judíos estadounidenses que toman esa decisión son ortodoxos, un grupo que es más probable que apoye la empresa de los asentamientos, dijo ella.

¨Vivir en asentamientos se ha normalizado dentro de la comunidad ortodoxa en Estados Unidos. La naturaleza política de ese acto se ha borrado o al menos atenuado¨, dijo Hirschorn.

Junto a estos impulsos ideológicos, existen también motivaciones prácticas que atraen a los inmigrantes estadounidenses a los asentamientos.

¨Es familiar para muchos estadounidenses. Igual que como Jerusalem está llena de anglos -el término usado comúnmente para los israelíes angloparlantes -¨así también lo está Efrat y Neve Daniel¨, dijo, refiriéndose a dos asentamientos populares con los inmigrantes estadounidenses en el bloque de Etzion en las afueras de Jerusalem.

De hecho, mientras que aproximadamente el 10% de los estadounidenses se mudan a los asentamientos, una mitad completa se muda a Jerusalem, en comparación al 21.7% de los inmigrantes franceses y el 3.4% de los rusos en el 2021.

Los asentamientos en el bloque de Etzion ofrecen a los inmigrantes estadounidenses una oportunidad para vivir justo a las afueras de Jerusalem -a 25 minutos en automóvil del centro de la ciudad sin tráfico -en un entorno suburbano.

¨La mayoría de estos estadounidenses van a barrios bonitos con casas familiares o departamentos grandes que están al nivel de lo que podrían haber tenido en Estados Unidos¨, dijo Hirschorn.

El gran número existente de ciudadanos estadounidenses que viven en los asentamientos se perpetúa a medida que los inmigrantes tienden a buscar compatriotas para facilitar su transición a un nuevo país. También explica por qué los inmigrantes de otros países, incluso personas que pueden apoyar políticamente los asentamientos, es más probable que se asienten en otro lugar.

¨Los inmigrantes tienden a rodearse de otros familiares, hasta que se integran a la sociedad¨, dijo Hirschorn. ¨Para los judíos franceses y rusos, eso no son los asentamientos¨.

Los inmigrantes franceses, rusos y ucranianos tienden a mudarse a ciudades con poblaciones de expatriados ya grandes.

Para los inmigrantes franceses, esto significa la ciudad costera de Netanya, donde terminó aproximadamente un tercio de ellos en el 2021, y Tel Aviv, donde un cuarto lo hizo. Los inmigrantes rusos y ucranianos se distribuyen de manera más uniforme entre Tel Aviv, Haifa y los distritos centro, sur y norte, según las cifras de la CBS.

 

Fuente:  The Times of Israel
Traducción: Comunidad Judía de Guayaquil

 

 

 



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